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Un poeta francés –Jacques Prevert (1900 -1977)- escribió “No Hay  que…”, poema  que dice así:

No hay que dejar que los intelectuales/    jueguen con los fósforos.

Porque, señores,/cuando se lo deja solo,/el mundo mental,/Señoooores,/

No es muy brillante.

Y no bien está solo/trabaja arbitrariamente,/erigiéndose por sí mismo/y/
según dicen:/ “generosamente en honor de los trabajadores de la construcción”/un auto monumento.

Repitámoslo: Señoooores,

Cuando se lo deja solo/el mundo mental/miente/Monumentalmente.
El sábado14 de mayo, en un selecto hotel de Nueva York. inició su rodada  desde la cima del poder el francés Dominique Strauss-Kahn, economista destacado y promisorio militante socialista que, de no mediar su asalto sexual a la mucama negra encargada de asearle la habitación,  pudo ser temible adversario del derechista Nicolás Sarkozy en las próximas elecciones presidenciales francesas.

Reporteando el tema para un periódico capitalino, recordé el poema de Prevert casi tantas  veces como llamé a Francia buscando a Anne Sinclair, brillante periodista y tercera esposa del ex Director Gerente del FMI. O a su segunda esposa, la relacionadora pública y empresaria de las comunicaciones Brigitte Guillemette, pues de la sinergia de talentos entre ambas comunicadoras –dicen los datos- resultó la imagen pública del político que los medios franceses gustaban denominar DSK, parafraseando la leyenda del inolvidado  JFK (John Fitzgerald Kenedy).

Finalmente, ni una ni otra aceptó mi entrevista. Pero siguiéndolas por internet, skype, mail  y teléfono, conversando con sus asistentes y colegas franceses y con latinos residentes en París, leyendo y escuchando medios franceses,  pude husmear el entorno de Straus-Kahn en los días más álgidos de esta historia.

MIRANDO BAJO LAS ALFOMBRAS

La torpeza de DSK desnudó algunos vericuetos del poder en el mundo global y evidencia que también en los países desarrollados el abuso del poder es posible por  una red de complicidades, de la cual la prensa no está en absoluto ajena.

Representante  emblemático de la que los franceses llaman “ izquierda caviar” y nosotros la whyzquierda,  el ex Director Gerente del FMI tiene una biografía sorprendente que, en lo político, comienza en 1983 con su ingreso al Partido Socialista a los 34 años, mientras aún era académico universitario. Allí se desarrolló al alero del líder socialista Lionel Jospin, en cuyo gobierno se desempeñó como ministro. Los vaivenes de su vida política –en permanente coqueteo entre la derecha empresarial y la izquierda socialdemócrata-  dan para otro artículo. Más interesante es observar lo que pasó en la sociedad y el partido socialista francés a raíz de su detención.

La semana que estalló el escándalo el “tout París”, estupefacto, no paraba de criticar la brutalidad de la detención y la humillación a que se sometía al alto funcionario, esposado ante las cámaras –lo que la Ley francesa prohíbe- y sin posibilidad de fianza en primera instancia. Una encuesta realizada esa misma semana indicó que el 57% de los franceses presumía que DSK era víctima de una trampa tendida por sus adversarios políticos, en la cual la mucama  acusadora era cómplice.

El periodista de derecha  Gerard Slama llegó a  decir que lo ocurrido es similar a…  “levantarle la pollera a la empleada doméstica” (y así de “irrelevante”, a su juicio).  Y del partido socialista francés, presidido por una mujer (Michelle Aubry) y con una postulante  a la presidencia del mismo género de la mucama negra agredida (Ségolène Royal) no hay hasta hoy una frase de solidaridad o respeto por la víctima.

PRESUNCIONES Y FELACIONES

A estas alturas hablar de “presunta víctima” no tiene sentido. El informe de la policía de New York, citado por el periodista chileno Raúl  Zamora, residente en Francia y ex jefe de la corresponsalía  de AFP, habla de que Strauss-Khan quiso forzar sexualmente a la trabajadora: “introduciéndole dos veces la verga en la boca e intentando, además, penetrarla tanto por la vagina como  por ano”. Y esta semana los medios informaron que se encontraron  en las ropas de la acusadora, muestras de ADN del ex directivo del FMI.

Inmigrante de Guinea Nafissatou Diallo (32), enfrentará en tribunales al huésped de la habitación que le correspondió asear el 14 de mayo y de la cual debió huir con las ropas desgreñadas y terror a perder su empleo. Terrible panorama para esta viuda, madre de una hija, de religión islámica y residente en un edificio del Bronx que se arrienda preferentemente a portadores del VIH, lo que podría dar cuenta de que la mujer también es portadora o… de que se las ingenió para arrendar el lugar más barato y confortable posible para ella y su hija  en la gran manzana.

JUGAR CON LOS FÓSFOROS

La conducta  que llevó a juicio al político y economista francés no es excepcional, sino parte del estilo de un líder que algunos medios llegaron a calificar como un lapin chaud (conejo caliente) respecto a lo cual su esposa, la refinada Anne Sinclair, declaró hace 5 años a L’Express  sentirse “orgullosa” porque “Es importante para un hombre que está en la política el que tenga poder para seducir”.

El diario izquierdista “Liberation” destinó el miércoles 18 de mayo  media página a informar sobre un debate que se produjo entre sus profesionales, reunidos en asamblea para discutir la misión del periodista y su deber de informar:

“Desde el domingo (15) –tras el arresto de DSK- sentimos que los medios de comunicación no podrían escapar a la tempestad -dice el artículo-  Muy pronto -agrega– se supo que las acciones compulsivas de este hombre eran conocidas de todos los periodistas. Entonces ¿por qué  haberlas silenciado? ¡Esta auto-censura no favorece a las acusaciones repetidas de colusión entre  políticos y medios de comunicación?”, cuestionaron estos periodistas.

El mismo diario  reconoce que no enviaba nunca mujeres a entrevistas con DSK “A partir del momento  en que no se puede enviar  a una mujer sola a entrevistarlo, hay una forma de violencia”, concluye el matutino.

Se ha comentado el escándalo que lo involucró en 2007 con una economista de larga carrera en el FMI  ( Piroska Nagy) del cual, una vez más, lo rescató Anne Sinclair. Pero poco se ha dicho que, además de los esperables apoyos de su partido, corrieron a auxiliarlo numerosas personalidades de la derecha francesa, incluido el propio Nicolás Sarkozy. Y que el FMI cerró su fugaz investigación con un comunicado que “exculpa” a su Director, admitiendo que cometió algunos “actos deplorables” que reflejan “un grave error de juicio”.

Curiosamente, él mantuvo su importante cargo y la economista en cuestión, debió buscar nuevos rumbos laborales, junto con un iniciar un nuevo estado civil, tras el escándalo mediático a que dio pie su infidelidad conyugal.

LA TRASTIENDA

Gisele Halimi, ícono de los derechos de la mujer en Francia, abogada, ex diputada izquierdista, escritora combativa y respetada, hizo parte del coro indignado de mujeres que delataron, desde la prensa, el contrasentido implícito cuando un partido que aspira a representar a los trabajadores, y preside una mujer, deja pasar los días  sin una opinión  definida sobre el hecho de que uno de sus líderes sea acusado de agredir sexualmente a una mujer trabajadora, pobre y perteneciente –además- a una minoría étnica.

Interrogada por Radio Europa 1, Halimi lamentó que “este país esté tan atrasado y que la situación de la mujer siga siendo tan peligrosa”. Denunció la tendencia a considerar culpable a la mujer víctima de una violación y explicó que por eso, las que son violadas temen denunciar a los criminales que las violan.

No pocos recordaron el caso de la joven periodista y escritora Tristane Banon quien, a los 23 años, fue a entrevistar al político y terminó huyendo, con la ropa desgarrada por quien ella describió como “una especie de orangután en celo”. Contó esa historia recién el 2007 en una entrevista televisiva, explicando que la persuadió de guardar silencio su madre, Anne Mansouret, consejera general del departamento de l’Eure y vicepresidenta PS de la región de Alta Normandía.

Más allá de los casos puntuales, el periodista Raúl Zamora nos aportó un dato que definitivamente saca el tema de  la anécdota que gana titulares, para mostrar la trastienda de la cultura en que se inserta el responsable de los hechos: “Se calcula que hay unas 75.000 mujeres violadas por año en Francia. –nos dijo Raúl-Y ni siquiera el 10% se atreve a ir a los tribunales. ¿Será escuchada Gisele Hailimi y las otras denunciantes del machismo francés? –se preguntó-  Difícil: a las que protestan desde hace años las dejan hablar, pero como quien habla en el desierto”.

LA INDIGNACION Y LOS INDIGNADOS

Por esas raras sincronías, un día después que DSK en Nueva York saliera del baño, pilucho y alborotado para saciarse con la “femme de menage”, en Madrid cientos de personas instalaron en la Puerta del Sol toda su indignación contra un sistema político y social cuyo correlato son líderes de los que desconfían transversalmente  y a cuya máxima elite pertenece el protagonista de esta crónica. Él es parte de aquellos a quienes  “los indignados” notificaron  su irrespeto y rabia con letreros que decían cosas como: “SI NO NOS DEJAN SOÑAR, NO LOS DEJAREMOS DORMIR”

Cuando DSK haya desaparecido hace mucho de la prensa, porque el volador de luces que gustamos llamar noticia se agotó, sus correteos de macho cabrío  seguirán levantando alfombras en la cultura  francesa, para mostrarnos lo que la “imagen-país” con frecuencia oculta. Tras el inentendible sin sentido de una conducta que sólo explica la convicción de DSK sobre la omnipotencia e impunidad que otorgaba  su poder,  aparecen evidencias del deterioro de una forma de vivir el poder político que se resquebraja ante nuestros ojos, desde distintos puntos de esta geografía sin distancias que hoy, por obra y magia de las tecnologías de la comunicación, es la patria de todos.

Encabecé este artículo con la caricatura que hizo de la situación el ilustrador chileno Guillo Bastías, ex caricaturista de revista APSI  y actual comentarista del mundo y sus alrededores, a través de su página “Humor libre en Internet” (www.guillo.cl).

Su dibujo expresa  – a mi juicio- la mejor síntesis de por qué este tema, que podría pasar como otro olvidable chascarrito de la aldea global, me parece tan relevante para nosotros en estos días en que muchos, de muchas formas, juegan con los fósforos  y muy pocos se preguntan si resistirían enfrentar las consecuencias de sus actos.

(Click en la imagen para ampliar)

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5 Comentarios sobre “Reporteando el viejo asunto de jugar con los fósforos

  1. Uff, no sabes lo refrescante que es leer tu nota tras todo el bamboleo periodístico franco-parlante de las últimas semanas !!!
    Voy a realizar mi “galería de periodistas de excepción”, ya tienes un escaño más que merecido querida y admirada amiga y colega.
    Besos desde Bruselas, el país sin gobierno que gobierna…

  2. Buenísimo tu análisis, yo creo que es importante seguir ad profundis, tal vez ya no este caso, porque es un caso que ya tiene su propia vida, al descubierto, sino observar ese fenómeno oculto por las costumbres y sobornos, que permite a los hombres en el poder utilizar a la “femme de menage”, que puede ser un país, un pueblo aborígen, un bosque vírgen, porque simplemente se creen con el derecho del poder. Lo sucedido con la mucama africana Ségolène Royal es un síntoma de la patología del poder.

    1. jajajajajaa…eres muy irónico Alfredo. Ségolène, si recordamos las pasadas eleccionrs francesas, sin duda ocupo el lugar de la femme de menage. Cherchez la femme corresponderñia decir ahora a los damnificados compañeros. Ou cherchez votre destin?
      Por ahí, entre tanto autor que hemos importado de Francia, no nos vendría mal por estos lados importar esa última pregunta. Digo yo.

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