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Querida familia, amig@s y compañer@s:

Hoy  la nieve cubre todo nuestro paisaje, hace frío.

¿Usted se ha preguntado alguna vez de quien son los pescados del mar que tranquilo nos baña? ¿Los ríos y los campos de flores bordados?

La cámara de diputados de la república, en una votación que exige quórum calificado, es decir mayoría absoluta sobre ciento veinte diputados,  ha determinado que los pescados de Chile no pertenecen al estado de Chile. Así de simple.

¿Y entonces? ¿Si no son  de todos los chilenos? ¿De quién son?

José Asencio, pescador artesanal de puerto Gaviota región de Aysén,  cumple hoy 19 días de huelga de hambre en una de las muchas formas de encender  alarmas por parte de los pescadores artesanales que solo aparecen en las noticias cuando se pierden en el mar o cortan las carreteras con barricadas y fogatas.

Alias Rambo, José está débil, ha perdido peso, duerme durante el día, pero cuando despierta mantiene su fe y su determinación.

A su alrededor se reúnen diariamente muchas personas a conversar, hacer música, discutir, aclarar puntos de esta Ley de pesca que deja en manos de armadores e industriales el futuro de los pescados de Chile. Los pescadores que no tienen bote, están destinados a desaparecer.

La ley entrega las cuotas vitalicia a los industriales, siete familias chilenas dueñas de toda la industria pesquera del país, me comenta. La cuota de los artesanales tenemos que dividirla entre cincuenta mil pescadores.

Rambo ha conseguido con este acto de denuncia, mantener vivo un conflicto  cuyo plazo final es diciembre de este año, cuando la Ley actual pierda su vigencia.

Ha solicitado la presencia del Ministro de Hacienda. Si no viene, mañana a las seis de la tarde, dejará de tomar líquido.

El tema  de la Ley de pesca es extenso y complejo. Trayectoria de desaciertos y desencuentros entre las organizaciones, pescadores, industriales, gobiernos. Alguien lo resume muy bien: Chile tiene realidades muy distintas y estas realidades no son consideradas en la discusión.

En un documento de la Comisión Nacional de Defensa del Patrimonio Pesquero que nos entregó Nelson Estrada en una de las visitas a Rambo, encontramos el detalle de los puntos votados por la cámara  de diputados que afectan a la pesca artesanal.

El senador Antonio Horwath Presidente de la comisión pesca, ha comprometido una sesión en Aysén, como el resto de las zonas donde esta ley afecta directamente a los pescadores artesanales.

Resulta preocupante que los diputados de la república voten a favor de puntos que claramente afectan el patrimonio de todos los chilenos. Preocupante también las denuncias públicas de que la Industria financia campañas políticas de parlamentarios, hasta de presidentes dicen algunos.

Las industrias, las corporaciones versus la ciudadanía.

Las corporaciones que se hacen dueñas de agua.

Las industrias madereras que se hacen dueñas del territorio de la Araucanía, producto de  una Ley perversa dictada en dictadura.

Hoy en la Araucanía se está viviendo una guerra anunciada, denunciada que nadie quiso escuchar.

Ayer fue el agua del mar para las salmoneras, hoy son los pescados.

Sin considerar el cumplimiento del convenio 169 sobre pueblos originarios, la cámara de diputados somete a votación también con Quorum calificado,  la idea de considerar el estatuto para pueblos originarios. La moción  se ganó con 58 votos,  pero se perdió porque no se obtuvo el cincuenta más uno de diputados en ejercicio. Catorce diputados no votaron.

¿A usted le gusta comer reineta?

Se proponía que este pescado fuera cien por ciento un recurso artesanal, pero esta idea fue rechazada.

Uno de los temas más discutidos de la ley, es la pesca de arrastre.

Se ha dicho tanto. Los buques de la industria pescan todo con las redes y lo que no los sirve lo tiran muerto de vuelta al mar, ayer el senador Horwath decía por la radio que muchas veces esto corresponde a más del 50% de lo que se recoge.  ¿Se imagina? Pulpos, Toninas, pecados que por tamaño están fuera de norma. ¡Todo!.

52 diputados rechazaron la idea de poner fin a la pesca de arrastre, 4 se abstuvieron y 48 votaron  en contra.

En todas estas votaciones faltaron diputados: ¿Dónde estaban?¿ Acaso no es obligatorio votar? Si no por reglamento, al menos por ética.

Lo único que parece ir quedando es el derecho a salir a la calle, a dejar de comer, tomarse lugares, parar los caminos, aunque eso signifique muchas veces enfrentarse a las FFEE, las policías entrenadas de ciudadanos contra ciudadanos, mientras los bolsillos de los grandes capitales continúan creciendo.

Rambo agradece todas las muestras de cariño, las cartas que ustedes le han enviado. El se ha empeñado en escribir  las respuestas para que yo las transcriba y se las mande.

Un gran abrazo,

Magdalena

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