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Acto 1: un solo actor en escena llenando todo el teatro.

Acto 2: el mismo actor en escena llenando todo el teatro.

Acto 3: el mismo actor sigue en escena y termina llenando todo el teatro.

¿Cómo se llama la obra?

PARLAMENTO

 

Por un segundo se me pasó por la mente dejar este texto hasta ahí, porque sentía que ya lo estaba diciendo todo, pero después pensé que al ser así de escueta estaba siendo tacaña con quienes aún no han visto la obra y más aún, con el equipo que hay detrás de esta tremenda producción. Que obviamente, no es sólo un actor en escena.

PARLAMENTO es una más de las excelentes producciones teatrales de Tryo Teatro Banda, la agrupación liderada por Francisco Sánchez quien en esta obra en particular, realiza un monólogo impecable sobre el Parlamento de Quilín del año 1641.

Pero la obra no se trata de eso. Se trata del parlamento, de la capacidad –o incapacidad- de parlamentar, de la intolerancia, del desdén, de la poca empatía, del pasado, del presente y probablemente del futuro de nuestro país.

Esta interesante propuesta de Tryo Teatro se sostiene en la brillante actuación de Francisco, quien utilizando recursos estéticos y musicales nos hace viajar al Chile de la conquista, donde el pueblo mapuche, aún crédulo, participa en el Parlamento de Quilín para asociarse con los españoles, quienes buscan un solo propósito, atacar al “enemigo común”: los colonizadores ingleses.

La gran gracia de esta obra es que con el pasar de los minutos, la historia de españoles, mapuches e ingleses se convierte en un escenario conocido, en una historia actual, en la triste realidad de un pueblo humillado, coartado por las ansias de poder y la ambición del que se siente superior, del dueño, del terrateniente, del conquistador.

Como en muchas de las obras de Tryo Teatro Banda, el apoyo musical es fundamental para crear el ambiente necesario, para unificar el relato, la actuación y la puesta en escena –tan simple pero tan poderosa que llega a sorprender– donde el actor se mueve de tal forma que logra llenar por completo el espacio disponible en escena.

El sonido, la instrumentalización, las luces, el despliegue. Todo es perfecto y funciona de tal manera que logra su objetivo: crear una relación con el público, la intensión de crear parlamento, una conversación que fluye entre los datos históricos, la actualidad, el humor y las distintas expresiones artísticas que se disfrutan a lo largo de la obra.

Por momentos, los espectadores estamos frente a una protesta, una declaración de guerra, una interpelación, un ajuste de cuentas histórico. Por momentos, parece ser que el público debe tomar partido, debe expresar su enojo o su conformidad con lo ocurrido hace tantos siglos, y al mismo tiempo, algo tan reciente, tan nuestro, tan del día a día.

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Se nos hace partícipes de la injusticia, “cómplices pasivos” de la burla. El público se incomoda e indigna, pero los indignos son otros, son los que sufren hasta el día de hoy. El tema es tan real y tan actual que no puedes quedar indiferente. El cierre de la obra no te deja opción, te sumerge en una vorágine de colores, en la explosión de un parlamento sordo, de una conversación que nunca llega a puerto.

Tryo Teatro Banda se hace cargo de lo que otros prefieren ignorar. Desde el arte, pone en la mesa el tema tabú, el problema histórico, el eterno cacho del gobierno de turno.

Usted no se quede fuera.

Si no está de acuerdo no importa. Vaya igual. Hágase parte. Sométase al ejercicio. Súmese al parlamento. Es lo que Chile necesita. Parlamento.

 

PARLAMENTO

Escrita e interpretada por Francisco Sánchez

Dirección: Andrés del Bosque

Compañía: Tryo Teatro Banda

Funciones: Teatro UC, del 30 de marzo al 30 de abril

Horario: Miércoles a sábado, 20:00 hrs.

Duración: 1:15 hrs.

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2 Comentarios sobre “A Chile le falta Parlamento

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