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Cada vez que aparecen estas 3 palabras, tiemblo,  es signo que se arrasa con algo… una tradición, un sentir colectivo, un quehacer humano que tiene sentido para otros humanos.

Moderno –Seguro- Profesional, así definen las nuevas autoridades o más bien los viejos autoritarios reencarnados en  jóvenes empresarios, al nuevo Censo Nacional.

Lograron transformar un acto ciudadano que involucraba a todo un país, en un impersonal y largo trámite de tres meses  donde  no tienes idea cuando te tocará,  por mi casa aún no se aparecen…

Yo fui censista  el año 70 y a mucha honra.

Estaba en mi último año de colegio, con 17 años me ofrecí de voluntaria con la misma pasión que después hacía trabajos voluntarios en la universidad. La motivación era la misma: ser parte de un país que quería ser mejor.

Nos preparamos con el fervor y la generosidad que sólo los jóvenes son capaces de sentir ante una misión altruista. Los voluntarios y voluntarias de todas las edades compartíamos un desafío común, lograr en un fin de semana que todas las casas del país abrieran sus puertas para saber cuántos éramos, como vivíamos y en qué creíamos los chilenos.

Me tocó un barrio modesto de la comuna de Macul, recuerdo que en cada casa me hicieron pasar y la familia entera apiñada en torno a la o el  dueño de casa seguían con atención todas las preguntas, a veces intervenían , discutían, alguna tallita…  me atendían con tecito , pan amasado, una empanadita , mote con huesillos, queques, sopaipillas, pebre cuchareado, que manera de comer! daba no se qué decir que no…. la gente se asomaba para ver si venía “la jovencita del censo”, los niños y los perros me acompañaban por las calles polvorientas, contentos todos , ellos y yo… contentos de ser parte de una misma cosa, protagonistas de un mismo país

Hoy el censo es Moderno- Seguro –Profesional, se demora 3 meses, los censistas ganan $ 300 mil pesos, andan uniformados, solos… y nadie los está esperando.

Me da terror pensar que algún día nos puedan  imponer  elecciones Modernas – Seguras- Profesionales, que duren meses, que cada uno  vote en solitario, que los cómputos  lleguen a tu mail  y que en definitiva pierdas todo contacto con la gente.

A mi en el colegio me gustaba la educación cívica, un ramo que ya no existe y que enseñaba como ser un buen ciudadano, aprendíamos de las instituciones y los poderes que regían nuestro país, de las organizaciones  civiles, de los deberes y derechos. A mi me gustaba la Filosofía un ramo que casi no existe y que enseñaba a pensar y a hacernos preguntas. A mi me gustaban las clases de Música un ramo que casi ya no se imparte y que ensañaba a escuchar y a encontrar tu tono dentro del coro.

A mi me gustaba mi país menos Moderno, menos Seguro,  menos Profesional …¡era un país mucho mas  humano y mucho mas entretenido!

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