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Cabeza, corazón y cuerpo es lo que nos conforma como seres humanos y nos permite habitar nuestros mundos. Algo evidente a simple vista, pero ¿qué tan alineados caminamos?, ¿qué tan conscientes somos de que estos tres elementos deben estar coordinados y articulados constantemente para permitirnos ver? Esta trilogía inspiradora y que ilumina la mirada permite descubrir nuestras experiencias y espacios que definimos para la relación con otros.

Cuando estamos alineados, cabeza – corazón – cuerpo, comenzamos a ver y nos hacemos visibles al resto. Comenzamos a identificar y definir espacios de relación en los cuales somos capaces de observar más allá de la imagen, podemos ver la emoción, somos capaces de encontrarnos en miradas y decifrar aquellos códigos que, muchas veces, establecemos como verdaderas barreras de protección que nos mantienen en nuestro espacio seguro.

Nos hacemos visibles, porque al estar alineados nuestras emociones, conductas y lenguaje nos descubre al otro, nos quita el velo de la individualidad y da pie al encuentro real, al emocional, a aquel que muchas veces desconocemos. Hacernos visibles no es solo un acto de poder ver, sino de sentir con el otro, de empatizar y de establecer conexiones mucho más rápida que una presentación formal o un perfil personal. Nos potenciamos de esta conexión, nos ilumina y nos hace irradiar haciéndonos visibles aun para quien no haga esfuerzo de ver.

Es claro, mirándolo de esta perspectiva la importancia de estar alineados, de ponerlo en práctica, es así como las comunidades humanas logran definir sus acuerdos y establecer una relación mucho más solida que establecer objetivos, misión y visión, desde la estrategia. El tejido de las relaciones humanas es denso y tejerlo o aprender a mirar sus hebras es lo que nos permite observar a una comunidad.

Como ejemplo vemos como los movimientos sociales logran tener el poder de hacerse visibles ante el resto, porque al compartir sueños, definir propósitos comunes y establecer relaciones van tejiendo esta red emocional y experiencial colectiva, mas allá del propósito principal, la importancia radica en el desarrollo de las personas y las relaciones que establece, consiguiendo proyectarlo.

Estar alineados es mucho más complejo de lo que parece y más simple de lo que se puede imaginar, requiere primero la voluntad y la disciplina de mantener en sintonía los tres elementos, siendo conscientes del proceso y disfrutándolo.

 

Aquí un texto inspirador para comenzar a trabajar en base de la trilogía Cabeza, Corazón y Cuerpo

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3 Comentarios sobre “Emociones que visibilizan

  1. Muy bueno! gracias por compartir 🙂
    Últimamente vengo analizando y estudiando los niveles de conciencia… como cambia gravitantemente nuestra vida cuando la ampliación de conciencia, aumenta nuestra percepcion y nos devuelve la capacidad perdida de “ver” las cosas relamente importantes.
    Saludos!

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