Compartir

En un clima fraternal y poético se presentó la Antología 2020 “Tiempos Turbulentos ” de PEN Chile.
Comparto la crónica poética “No quiero morir” que forma parte de este libro y que se refiere a la Peste Antonina que asoló el Imperio Romano durante 25 años y que muchos historiadores consideran una de las causas del fin del Imperio.
.

No quiero Morir

A la orilla del Tigris sufre Seleucia

Las tropas saquean, violan y festejan

Imponen el orden y la paz del Imperio

La sangre de los partos moja la arena.

La ira de Apolo castiga

La profanación del templo

Junto con el botín y el oro

Las legiones empacan la peste.

Fiebre, vómito, tos, diarrea, pústulas

Matan más que lanzas y flechas.

*

Ya no caminaré por tierras extrañas.

Por unas monedas

Y la gloria de los generales

A la orilla de esta calzada

Me abandonan la vida y los recuerdos.

En el cielo graznan los cuervos.

*

La muerte llega a Roma

Y sigue hasta Hispania y Britannia

Nauseabunda pestilencia

Invade las ciudades.

El famoso Galeno

Dice que en sueños

Los dioses le ordenan

Abandonar Roma.

Los que pueden huyen al campo.

*

El agua está fría

La fiebre no baja

Me quemo por dentro

En el agua flotan

Mis oscuros excrementos.

Qué indigno camino a la muerte

Después de una vida de gloria.

*

En el Campo de Marte

Enredado en lo alto de una higuera

Un augur anuncia el fin del mundo.

Una serpiente susurra al oído de otro adivino

“Apolo, el peludo, aleja la aparición de la plaga”

Los romanos escriben el conjuro en las fachadas.

A Galeno lo guía la razón

Crea su propio remedio

Un tónico de amapola, serpiente, silfio, heléboro

Y otros treinta y tres ingredientes medicinales.

En los hogares más antiguos usan amuletos

Cuelgan campanillas de un falo con alas.

Pero Apolo no lee, no razona, no escucha

Aunque ya olvidó el motivo

Sin misericordia prolonga la venganza.

Desde las catacumbas

Los cristianos aprovechan

De ofrecer el Paraíso.

*

De qué sirve ser recordado

En bella estatua rizada

Con gesto valiente y corona de laureles

Si no escucho su risa

Ni el canto del grillo.

Cambio un siglo de mármol

Por una hora de vida.

*

Humo

De incienso y mirra

De piras de cadáveres

De laurel y romero

De velas y lámparas

Fugaces luces señalan los muertos

Procesiones, quejidos y llanto

Retumban en los adoquines

La muerte golpea las puertas

El miedo invoca al silencio.

El ilustre se transforma en estatua

El pobre arde en la fosa común.

*

No quiero morir

No quiero dejar de ver

Los campos de trigo maduro brillando al sol

No quiero dejar de escuchar

El canto del viento entre las hojas del álamo

No quiero dejar de morder

La carne amarga de las aceitunas

No quiero dejar de sentir

La caricia de tus labios en mi piel

No quiero dejar de esperar

Que cruces la puerta volviendo del mercado

No quiero dejar de oler

La fragancia del jazmín antes de dormir

No quiero dejar de celebrar

Junto a los viejos compañeros

No quiero morir

*

El emperador Marco Aurelio

Inmortal en sus aforismos

Llama a vivir cada instante.

Nadie sabe si será el último

El despertar de esta mañana

O el sueño de esta noche.

Compartir

Alguien comentó sobre “No quiero Morir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *