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Las personas siempre están comunicando, no sólo con el lenguaje o con la escucha, con todo el cuerpo. Experimentamos innumerables experiencias de comunicación, las que configuran nuestra manera de relacionarnos y de construir nuestra memoria colectiva, nuestro mayanadi,  “que es la memoria en permanente movimiento surgida de nuestra experiencia” Hemos estado presenciando muchos movimientos ciudadanos y expresiones que provienen de algún hecho o estado emocional de un grupo de personas que están construyendo su y nuestro mayanadi, modificando conceptos, maneras de expresarse, formas de comunicar y de constituirse como comunidad.

En Chile, todas las personas, no sólo estudiantes organizados, marchando y dialogando, estamos siendo parte de esta construcción colectiva, en la que somos creadores y espectadores desde la opinión, difusión en redes sociales, participación en marchas, fotografías, artículos, conversaciones. Como también somos parte de la construcción de la memoria mundial, ciudadanos del mundo que, por ejemplo, este 15 de octubre “Indignados” se manifestarán coordinada y organizadamente a nivel global.

La expresión emosocial, se manifiesta de manera consciente o inconsciente, en las multitudinarias marchas, afiches, flashmobs, videos, instalaciones, disfraces, entrevistas. Esta expresión va más allá de las técnicas de comunicación o de las maneras convencionales de manifestación: las personas son una expresión en sí y es su presencia en comunidad la que construye una memoria colectiva y que con un fin común está definiendo nuestro presente e influyendo en nuestro futuro, modificando emocionalmente nuestro mayanadi.

Chöygam Trungpa define como arte dharmico, “al estado diferente donde no se está pendiente de sí mismo sino de lo que se está haciendo”. El arte dharmico comunitario que estamos presenciando constituye una expresión emosocial, que muestra nuevas maneras de expresarnos, comunicarnos y organizarnos, definiendo a una comunidad manifestante que ejerce de diversas maneras su ciudadanía opinante y presente. Expresión emosocial desde la intensidad en las manifestaciones conformando un arcoíris emocional y social pendiente de un bien común, diverso, solidario e integrador.

Somos afortunados de presenciar este tiempo de movimiento ciudadano mundial, en donde las emociones están volcándose en cada rincón de nuestro planeta tiñendo diferentes causas, movimientos o demandas, configurando la memoria de un nuevo mundo con mayor igualdad, justicia y libertad.

 

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Alguien comentó sobre “El nuevo mundo emosocial

  1. Me pregunto de qué manera esa forma de expresarse, esa emocionalidad colectiva contribuye también a la conformación de nuevos paradigmas. Como ello constituye lenguajes diferentes que se traducen en discursos y acciones distintas a las conocidas…d

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